EL PODER DE LA PALABRA
A blog post by: Alejandro Chabán
¿Cuántas veces hemos escuchado, las palabras se las lleva el viento? Desde nuestros abuelos, ¿cierto? Yo digo que las palabras no vuelan con el viento, pesan, se quedan y pueden dar mucha alegría, pero también hacer mucho daño.
Intenta recordar alguna vez cuando alguien te dijo algo lindo. Quizás, te felicitaron por un trabajo bien logrado o tal vez que te veías muy bien.
¿Recuerdas cómo te hicieron sentir esas palabras? Cómo te afectaron o incluso cambiaron completamente quién eres.
Si las palabras de otra persona pueden afectar de esta manera, imagina cómo tus propias palabras afectan tu vida, lo que crees sobre ti mismo y cómo la vives.
Las palabras tienen poder. Todos los días usamos palabras poderosas. Algunas pueden aumentar o disminuir nuestro mensaje o intención. Por eso, es muy importante la selección de tus palabras, en especial las que te dices a ti.
1. TOMA EL CONTROL
Empieza siempre transformando tu actitud, esta es una decisión que tomas, nadie más lo puede hacer por ti. Al ver el lado bueno de las cosas usarás palabras que te motiven, que te dan confianza y que te ayuden a lograr todo lo que te propones.
2. MENOS “NO” Y MÁS “SI”
Cuando palabras que no aportan te viene a la mente, como por ejemplo: “No puedo,” “No soy capaz,” “Me van a criticar.” Detente y escúchate y cambia “Si Puedo,” “Soy Capaz,” “Existen diversos puntos de vista”
3. AFIRMA QUIEN ERES
Afirma quién eres, tus sueños, tus esperanzas y tus éxitos con dos de las palabras más poderosas que puedes pronunciar: “Yo soy.”
Estas pequeñas palabras increíblemente poderosas son las palabras más importantes de tu vocabulario. La forma en que terminamos la frase “Yo soy…” define quién eres.
Entonces, cuando dices “Soy … gordo / perezoso / tímido” o si por lo contrario decides decir “Yo soy … saludable / inteligente / trabajador… recuerda que tú eres quien tienen el poder.
4. SIEMPRE EN POSITIVO
Es importante elegir las palabras que vas a usar con cuidado. Debemos usar palabras que ayuden a enfocar tus metas y resultados positivos. En lugar de decir “Debería hacerlo”, di “Lo haré” En vez de decir “Ojalá ocurra,”, di “Va a pasar.”
Recuerda las palabras trabajan para ti.
5. HABLA DESDE EL CORAZÓN
Conéctate cada día con tu ser real, con tu propósito y con tu visión. Hablar desde el corazón es quitarle poder a las creencias negativas de la mente y abrir la puerta a la prosperidad.
Respira y conéctate con esa energía de amor para que abras el camino hacia el éxito y tu bienestar.
Con Amor,
Alejandro